Síntomas no motores

La enfermedad de Parkinson (EP) suele considerarse una afección que solo afecta el movimiento; sin embargo, la mayoría de las personas con EP también experimentan una variedad de otros síntomas conocidos como síntomas no motores.

Estos síntomas pueden no ser visibles para los demás; sin embargo, son muy comunes y, a veces, pueden ser más molestos e impactar más las actividades diarias que los síntomas motores.

Los síntomas no motores —como la pérdida del olfato, el estreñimiento o la depresión— incluso pueden aparecer años antes de recibir un diagnóstico formal de Parkinson. Es fundamental reconocer y tratar estos síntomas. Asegúrese de comentar cualquier cambio con su equipo médico, ya que muchos de estos síntomas pueden manejarse con el tratamiento adecuado.

Los Síntomas No Motores Incluyen:

Bienestar General

Fatiga
Problemas oculares
Problemas de sueño
Presión arterial baja
Problemas de piel y sudoración
Dolor
Incontinencia urinaria
Disfunción sexual

Las estrategias clave para mantener el bienestar incluyen: asegurar un buen descanso, una dieta saludable, ejercicio regular y chequeos médicos periódicos.

Salud Mental

Las personas con Parkinson pueden enfrentar diversos desafíos de salud mental además de sus síntomas físicos. Enfocarse en la salud mental es esencial para el bienestar de las personas con EP, sus familiares y cuidador.

Ansiedad
Depresión
Demencia
Cambios cognitivos
Alucinaciones/delirios

Sistema Digestivo

Los problemas del sistema digestivo son comunes en la enfermedad de Parkinson y pueden incluir síntomas como estreñimiento, náuseas y retraso en el vaciado gástrico (gastroparesia). Manejar la dieta, mantenerse hidratado y trabajar con profesionales de la salud puede ayudar a mejorar la salud digestiva y el bienestar general.

Estreñimiento
Náuseas
Dificultad para tragar

Bradicinesia

Depresión